Cuando los pacientes cumplen el sueño de formar una familia gracias a la ayuda de un donante, ya sea de óvulos, esperma o ambas cosas, siempre llega el momento de decidir si se le va a contar o no el origen de su concepción cuando ese niño sea un poco más mayor. Se trata de una decisión personal que debe afrontar cada familia, no hay una opción más válida que otra, ya que dependerá de muchos factores como pueden ser la aceptación por parte del resto de su entorno, así como de la cultura del país o las leyes del mismo.
Desde la Sociedad Española de Fertilidad (SEF) aconsejan contarle al niño el motivo de su origen, consideran que en una relación afectiva no debe haber secretos, puesto que ocultar información crea una distancia y adoptar una postura de sinceridad con el niño favorecerá la relación entre padres e hijos.
La SEF opina que el momento adecuado es entre los 3 y los 8 años, ya que se trata de una época de muchas preguntas en la que el niño está comenzando a construir su identidad, la imagen que tiene de sí mismo y la de los demás. Según indican, no es recomendable retrasarlo a la adolescencia o pre-adolescencia, ya que pueden surgir conflictos típicos en esa fase del desarrollo.
Desde FIVSANTANDER, recomendamos que se explique al niño su origen por donación de gametos con ejemplos o como si de un cuento se tratara. Hoy en día, podemos encontrar literatura especializada y puede ser muy útil para los padres a la hora de enfrentarse a esa situación.
A continuación, te ofrecemos una serie de cuentos, que podrás encontrar en distintas librerías, para poder explicarle a tu hijo que ha venido al mundo gracias a la ayuda de la medicina reproductiva, a la donación altruista de un donante y al amor incondicional de sus padres:
La vaca que puso un huevo. Andy Cutbill (autor) y Russell Ayto (Ilustrador), 2008.
Macarena es una vaca que está triste porque se considera vulgar y, de repente, pone un huevo. Este acontecimiento despertará las dudas y la envidia del resto de la granja. La vaca que puso un huevo es una preciosa, dulce y divertidísima historia que habla sobre conseguir el coraje necesario para defender las convicciones, incluso cuando los demás dudan de ti.
Un Regalo de Vida Chiquititito, Un Cuento de Donación de Óvulos Para Niños. Carmen Martinez Jover (autora) y Rosemary Martinez (ilustradora), 2011.
Este cuento está escrito especialmente para niños. Es una conmovedora historia que habla sobre una feliz pareja de conejitos, Comet y Pally, que lo tienen todo en la vida menos un conejito bebé. Entonces, a la mamá se le informa de que ya no tiene óvulos para concebir. Gracias al ejemplo con conejitos los niños podrán entender de manera natural cómo es desear mucho tener un bebé y conseguirlo gracias la donación de óvulos.
Mamá sueña con un bichito de luz. Judit Franch (autora), 2014. Y Mamá y Papá sueñan con un Bichito de Luz. Judit Franch (autora), 2015.
Ambos libros empiezan con un sueño y la visita de un bichito muy insistente que se cuela en los pensamientos de los papás mientras duermen.
Mamá sueña con un bichito de luz es el primer libro de Judit Franch, madre soltera por elección. Se trata de un libro especialmente orientado para aquellos niños nacidos en una familia monoparental. El segundo libro: Mamá y Papá sueñan con un Bichito de Luz, es la adaptación que hizo la autora para familias heterosexuales. En ambos títulos, cada familia podrá completar el relato con sus detalles particulares e ir ampliando o profundizando la información en la medida que el niño manifieste curiosidad.
El objetivo principal que tienen estos libros tan especiales es explicar el origen de cada niño con ejemplos que ellos puedan entender. Esta literatura se adapta a su edad para que, sin prejuicios, puedan disponer de la información necesaria y que puedan percibir su origen como algo natural que siempre ha formado parte de su vida.
No hay que olvidar que la carga genética no determina la forma de pensar ni de amar del ser humano, se trata de características que se obtienen con amor, atención, educación y la transmisión de valores de padres a hijos. En FIVSANTANDER, muchas de nuestras pacientes tienen dudas por el hecho de no compartir genes con su futuro bebé, pero una vez que se ha implantado el embrión lo sienten como lo que es, su propio hijo.